Cuando se tiene a un bebé recién nacido en brazos, muchas personas tienden a cometer algunos fallos que perjudican al bebé. Desde Fertility Benidorm, clínica de fertilidad en Alicante, te contamos este artículo algunas claves para coger a un bebé correctamente.
Beneficios de coger a un bebé en brazos
En primer lugar, coger a un bebé es muy beneficioso para el niño o niña, ya que el bebé necesita cercanía con sus padres, a la vez que produce una sensación de tranquilidad y bienestar hacia ellos. Aunque hay gente que piensa que es una forma de malcriar a un bebé, no lo es, pues los bebés necesitan de afecto y protección por parte de los padres. Es positivo que se acostumbren a ser bien tratados, a ver satisfecha su necesidad de contacto y en definitiva, a ser queridos.
Cuando se acerca la llegada de un bebé y en los primeros momentos tras su nacimiento, los padres primerizos pueden llegar a tener cierta inseguridad a la hora de sostenerlo entre sus brazos. Surgen dudas en cuanto a cómo hay que apoyar la cabeza del bebé o cómo hacer para no apretarlo demasiado.
¿Cómo coger a un bebé de forma adecuada?
Para cogerlo correctamente tenemos que tener en cuenta que su musculatura no tiene fuerza suficiente para soportar el peso de su cabeza, por lo que especialmente durante los dos o tres primeros meses hay que prestar especial atención a sujetar bien la cabeza para que no se le caiga hacia atrás o hacia los lados.
Posiciones en que puedes cogerlo
- Una posición básica es tenerlo entre los brazos en horizontal para acunarlo. Hay que apoyar su cabecita y su cuello descansando en nuestro antebrazo y codo. Mientras tanto, la otra mano la colocaremos debajo de sus caderas. Desde esa posición se le puede mecer tranquilamente. Es importante procurar acercarlo mucho a nuestro cuerpo, para que sienta el calor de sus padres. Se sentirá seguro si lo sostienes con firmeza, ya que le proporcionarás seguridad y mayor comodidad y bienestar.
- Para mantenerlo en brazos en posición vertical, una mano tendrá que sostener la parte inferior y la otra la espalda. En esta postura, la cabeza descansa sobre nuestro hombro. En el caso de querer sentarte, puedes tumbarlo boca arriba sobre tus rodillas y colocar las dos manos detrás de su cabeza y su cuello. Desde esta posición puedes interactuar con él, haciéndole gestos o tratando de que se ría.
- Para tumbar al bebé colocaremos una mano debajo del cuello y otra entre sus nalgas y la parte baja de su espalda mientras lo depositamos suavemente prestando especial atención a su cabeza.
- Otra postura también habitual es colocar al bebé boca arriba o boca abajo sobre el antebrazo o las piernas. La posición boca abajo es aconsejable para que expulse los gases, sobre todo en caso de cólicos. Está desaconsejado sentar al bebé durante los primeros meses, ya que se pueden provocar daños o lesiones en la columna vertebral.
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